La creencia general ha dictado por años, que la forma de crecer en nuestros negocios es a través de nuevos clientes, abrirnos al mercado y llegar a lugares donde antes no teníamos presencia y aunque esto pueda ser cierto, es importante resaltar la importancia, quizá superior, que tiene el reforzar la relación con nuestros clientes actuales.
La importancia de esta decisión está en el valor agregado que cada empresa da a sus clientes mediante el servicio, visto como un concepto integral que nos obliga a trascender de un buen trato como parte de la cultura del negocio o un sistema de recepción de quejas y reclamos, a un servicio y acompañamiento COMERCIAL personalizado.
La personalización nos obliga, de una u otra manera, a conocer a cada uno de nuestros clientes, conocer su enfoque o la razón de ser de su negocio, la rotación o el comportamiento de nuestros productos en su mercado y por ende, conocer sus fortalezas y posibilidades de desarrollo y crecimiento.
Por eso para IMSA S.A es clave administrar la relación con nuestros clientes a través de elementos como la capacitación, la motivación, el acompañamiento y el respaldo que está detrás de la adquisición de un producto son claves en la seguridad y el fortalecimiento de la relación con el cliente y son los pilares que forjan la estructura comercial que IMSA esta en capacidad de ofrecer a sus clientes.
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